...y echo de menos su amor.
Estoy feliz, no creáis lo contrario. Pero esta felicidad tonta, que sabes que no es real, que es quebradiza. Se va a romper cuando menos te lo esperes, te la van a romper o la vas a romper tú mismo cuando te canses de esperar, cuando veas que eso que te hace feliz no es más que un espejismo...o no.
O no. Porque siempre queda la duda. Pero esas cosas sólo pasan en las películas, y concretamente en las americanas. Al final el chico bueno consigue a la chica. Pero en la vida real no funcionan así las cosas. O sí.
Tal vez el problema sea que nos creemos protagonistas de la película, y en realidad no seamos el bueno que se lleva a la chica, sino que el bueno es el que realmente consigue a la chica, a pesar de que para nosotros sea el malo de la película... ¡Cómo nos gustaría ser directores y poder hacer nuestra propia película! Pero no puede ser, las películas las hacen otros, nosotros vivimos la vida, nuestra vida.
Ahora soy feliz, y no os imagináis cuanto, ¿se romperá?
Esta es la mejor canción de amor que se ha escrito. Y no, ella no es M...
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